Siempre me han gustado las historias de viajes en el tiempo, así que esta ha sido la principal razón por la que he escogí este libro.
Sinopsis:
Tras la muerte de su hermana Katrina, Eva Ward
traslada sus cenizas a la casa de Trelowarth House, la casa en Cornualles donde
pasaron juntas los veranos de la infancia. El mantenimiento de esta preciosa
casa construida en el siglo XVIII, con sus magníficos jardines y admiradas
rosaledas, constituye un problema constante para Mark Hallett, el actual
propietario y amor adolescente de Katrina. A fin de combatir la tristeza y a la
vez ayudar a Mark y a la hermana de este, Susan, Eva colabora con su proyecto
de abrir un salón de té en la mansión, que atraiga la visita de los turistas.
Vagando por la mansión, un día Eva oye voces de desconocidos y se tropieza con hombres vestidos de una forma extraña, con ropa de otra época. Para su asombro, ellos también viven en la casa de Trelowarth, pero en otro siglo: son los habitantes de la casa del siglo XVIII, dedicados al contrabando y conspiradores contra el trono de Inglaterra.
Vagando por la mansión, un día Eva oye voces de desconocidos y se tropieza con hombres vestidos de una forma extraña, con ropa de otra época. Para su asombro, ellos también viven en la casa de Trelowarth, pero en otro siglo: son los habitantes de la casa del siglo XVIII, dedicados al contrabando y conspiradores contra el trono de Inglaterra.
Sin saber cuándo ni cómo, Eva se va tropezando
con los hermanos contrabandistas Jack y Daniel Butler, y participa cada vez más
en sus vidas. Viaja sin control entre el presente y el pasado, y al darse
cuenta de que se está enamorando de Daniel Butler, empieza a no saber cuál es
su lugar.
Autor:
Susanna Kearsley nació en Canadá en 1966. Estudió
ciencias políticas y trabajó durante un tiempo como conservadora en un museo,
pero lo abandonó todo para dedicarse enteramente a escribir.
Opinión:
A su favor, se trata de un libro muy fácil de leer, ameno y bien
redactado. La prueba es el tiempo record en el que lo he leído. Pese a
catalogarse como un libro de corte romántico histórico, es más romántico
que histórico aunque no en exceso empalagoso. El marco histórico sirve
únicamente de acompañamiento a la historia de amor, por ello se queda
para mí un poco flojo, teniendo en cuenta mi inevitable comparación con
el libro Forastera de Diana Gabaldón.
Tal y como indica la sinopsis, la protagonista viaja en el tiempo al
S.XVIII donde conoce a unos contrabandistas implicados en el movimiento
jacobita. Éstos habitan en la misma casa donde ella reside en el
presente. Poco a poco y sin ningún control los viajes a ese tiempo se
irán haciendo más frecuentes. Se desarrollan por tanto dos historias.
Por un lado la de los personajes del presente de la protagonista (que no
descubren sus viajes en el tiempo) y la de los personajes que conoce en
el s.XVIII. Todos en la misma localidad y casa.
La historia se desarrolla en Cornualles. Por si alguien no sabe donde se ubica, es un condado en el suroccidente de Inglaterra.
En cuanto al momento histórico y aunque no se desarrolle en profundidad
(todo lo contrario que las descripciones de la vida cotidiana de ese
tiempo) es en 1714 cuando la reina Ana de Gran Bretaña. Ésta muere sin
descendencia y surgen dos candidatos al trono totalmente contrapuestos,
en especial en el ámbito religioso.
Para entender un poco mejor esto tendríamos que retroceder al reinado de
Jacobo II, padre de la reina Ana, primera soberana de la Gran Bretaña,
que fue depuesto en la Revolución Gloriosa por querer conceder la
tolerancia religiosa a los católicos romanos. Los ingleses no deseaban
el inicio de una dinastía católica. La hermana y cuñado de la futura
reina Ana (protestantes), María y Guillermo, invadieron Inglaterra y
destronaron a Jacobo II. Esta pareja murió sin descendencia pasando el
trono a Ana. Su reinado estuvo marcado por la tentativa de convertir los
reinados de Inglaterra y Escocia en uno solo, consiguiéndolo en 1707.
Ana tampoco tendría hijos provocando a su muerte un conflicto en la
sucesión entre su hermano pequeño, Jacobo (educado en la fe cristiana y
apoyado por los escoceses) y el que sería finalmente proclamado Rey,
Jorge I (protestante, alemán, primo segundo de la reina Ana y aceptado
por el Parlamento).
Los herederos de Jacobo II tomarían el nombre de Jacobitas y durante años pelearon sin lograrlo por la restauración dinástica.
Ana I de Gran Bretaña
Y esto sería el momento histórico en
el que se desarrolla el libro, la pelea por el trono entre los
partidarios del hijo de Jacobo II y los partidarios del futuro Jorge I
(o dicho de otra forma, entre protestantes y católicos). No quiero
desarrollar mucho más este tema ya que no lo hace el libro y puede ser
algo pesado.
Para concluir con este comentario, recomendaría el libro si te gusta
este tipo de novelas y quieres pasar un rato entretenido. Es muy ameno,
ligeroy la historia es entretenida. Está muy bien escrito.
Me ha gustado pero es facilmente olvidable.